viernes, 11 de agosto de 2017

El huído que leyó su esquela

Leo "El huído que leyó su esquela", el último libro que ha escrito el televisivo Fernando Delgado y, como no he leído ninguna de las sinopsis que se ofrecen de su argumento, me ha resultado una novela demasiado temerosa y lenta, que precipita su desenlace en el capítulo final. Así, esta obra acerca de un hombre que lleva 20 años huyendo -más de sí mismo que de los hechos sucedidos en una isla mucho tiempo atrás-, está relatada por un narrador omnipresente que me muestra la visión que tienen de la figura del huído todos los personajes de esta novela que se desenvuelve en la ciudad de Berna: Erica su novia que, legitimando -en un determinado momento- las razones para matar en tiempo de guerra, deja que se llene su mundo de desolación cuando entran en él las misteriosas cartas que el huido recibe como una llamada de ese pasado que lo aleja de ella, enviadas por una mujer que no sabe si quiere encontrarlo o vengarse de él; Aldes, la librera protectora que ayuda a Charles a desvelar las trampas de la memoria y Antonio, el conserje español que deja que el huido se ensimisme en sus recuerdos. Después de haber leído sus dos últimas novelas, "Me llamo Lucas y no soy perro" y "Sus ojos en mí" veo la tremenda evolución del escritor al elaborar esta obra más madura acerca de los recuerdos y los miedos de un huído, consiguiendo caracterizar correctamente a su personaje principal como un hombre temeroso (se cree vigilado en todo momento por los búhos: los desconfiados y vigilantes bearneses siempre raudos en llamar a la policía al más mínimo sonido extravagante) y angustiado por las señales que deja la vida pero me ha resultado una novela con demasiados silencios. De 4.